WITTGENSTEIN'S FIRST ANNOTATION IN ON CERTAINTY
José Luis Herrera Díaz
Bachiller en Filosofía por la Universidad Nacional Federico Villarreal.
Correo-e: newton1729@hotmail.com
Resumen
Este es un
análisis de la primera anotación del filosófico vienes Ludwig Wittgenstein
contenido en el libro Sobre la Certeza. En ella se presentan elementos claves para la comprensión del
resto del texto como son el asombro filosófico y su relación con la paradoja de
Curry.
Palabras claves: Moore, asombro,
Curry, conceder, certeza
Abstract
This is an
analysis of the first annotation of the Viennese philosopher Wittgenstein
contained in the book On Certainty. It presents key elements for
understanding the rest of the text, such as philosophical wonder and its
relationship with Curry's paradox.
Keywords: Moore, amazement, Curry, grant, certainty
1. Introducción
Desde que Platón[1]
sostuviera la importancia de la admiración en el surgimiento de la filosofía,
distintos autores han seguido su posición, a pesar de ello, no parece fácil
encontrar frases de asombro en las obras filosóficas, que por lo general se
muestran muy racionales y muy poco
dispuestas a mostrar emociones, esto puede deberse al estilo de escritura que
muchas veces busca parecerse más a una
demostración matemática, asumiendo implícitamente que esta es la forma general
de la racionalidad y, que se debe como
en todo discurso matemático, excluir las emociones, sin embargo, Wittgenstein
posee un estilo de anotaciones llenas de intensidad que se manifiesta en todos sus textos, por esta razón, resulta
razonable preguntarnos ¿cuáles son las frases que reflejan la admiración y el
asombro filosófico en nuestro autor?
En
un autor que busque el desarrollo lógico de su exposición, es razonable
encontrar al comienzo de su exposición una introducción o contexto que le
permita ingresar al tema, pero en el
caso de Wittgenstein la exposición se da por un conjunto de
observaciones, es decir, tal y como las va pensando o creando y si bien en
muchos textos hace revisiones de estas observaciones, en el caso de Sobre la
Certeza (SC) no hubo esta revisión, pues el autor no solo no terminó el
texto, sino que fue sorprendido por la muerte[2].
Siendo
que el desarrollo de SC se da por anotaciones de un autor, lleno de intensidad
y que no oculta sus emociones, ¿no es acaso razonable esperar en la primera
frase el asombro y la admiración que explique el desarrollo del texto?, parece
ser lo más razonable. La primera anotación debe ser tomada como aquella
observación que lo deja claramente sorprendido, que lejos de ser una respuesta
genera preguntas, como aquella verdad que se nos impone y nos obliga a pensar,
de forma inexcusable. Esta anotación existe y si bien su descubrimiento genera
un placer, de inmediato la tarea de comprenderla genera una presión y una
angustia sobre el filósofo que es acosado por los cuestionamientos y
Wittgenstein simplemente así lo confiesa[3].
Nuestro
énfasis en encontrar las frases de asombro de los autores no solo es producto
de querer encontrar algo bello, sino que puede servir para la comprensión del
texto. La observación de lo asombroso suele ser pre teórica esto es que ella
aún no ha sido explicada, sino solo expuesta, esto permite no solo ver o al
menos imaginar como el autor explica lo asombroso, sino también plantearnos
como es que nosotros, la comunidad que viene[4],
podemos interpretarlo.
Pero,
¿qué es lo que asombra a Wittgenstein?, asumiendo que lo que lo asombra está
contenido en la primera anotación paso a citarla:
1. Si sabes que aquí hay una mano, te concederemos todo lo demás.
(Por supuesto, decir que una proposición semejante no puede ser probada no
significa que no pueda ser derivada de otras proposiciones; cualquier
proposición puede derivarse de otras. Pero puede suceder que estas no sean más
seguras que aquella). (J. H. Newman hizo una observación curiosa a este respecto)
(Wittgenstein 2009, 641).
Como
podemos ver se trata tan solo de una frase y dos paréntesis. En el primer
paréntesis hay una aclaración de la primera frase y en el segundo una
observación sobre el primer paréntesis, por esta razón resulta claro que el núcleo
de la primera anotación es la primera frase, es decir, “Si sabes que aquí hay
una mano, te concederemos todo lo demás”, llamemos a esta frase el núcleo.
De
acuerdo a nuestro análisis anterior, el núcleo tiene grandes posibilidades de
contener el asombro filosófico que llevó a Wittgenstein a escribir Sobre la
Certeza. Se trata de un condicional y mientras que el antecedente es una
proposición cualquiera, el consecuente sostiene una promesa al parecer
extraordinaria y por ello mismo digna de asombro “te concederemos todo lo
demás”, parece pues que sí hay elementos para asegurar que esta frase contiene
la idea que asombro a Wittgenstein.
2. El condicional del asombro
Para explicar lo
que el condicional significa, debemos remontarnos al problema del conocimiento
certero, del conocimiento verdadero, que ha estado presente desde el comienzo
de la filosofía. El problema es el siguiente ¿Cómo podemos saber si nuestro
conocimiento es verdadero? Para responder esta cuestión el ingenioso Descartes
distinguió entre el conocimiento inmediato y el conocimiento mediato[5].
Mientras que el conocimiento inmediato lo obtenemos directamente de los
sentidos, el mediato es el resultado de la justificación. Toda la ciencia es
conocimiento mediato y es sumamente importante. Por otro lado, el conocimiento
inmediato nos informa de proposiciones aparentemente menos importantes por su
singularidad como son “tengo un cuerpo”, “sé que estoy aquí” etc. Mientras el
conocimiento mediato se demuestra (por ejemplo, a partir del método científico),
el inmediato es difícil de probar por no pertenecer a una estructura en la que
se pueda generalizar, de modo que su situación termino generando un problema
filosófico[6],
pues mientras existían métodos para probar las orbitas de los planetas, no parecía
haber forma de demostrar cosas tan simples como que la mesa de la sala
es marrón.
El
filósofo británico G. E. Moore, sostuvo en su ensayo “Defensa del sentido
común”, que un conjunto de estas
proposiciones singulares, que son de sentido común, son indudablemente
ciertas. Proposiciones como: “soy un ser humano”, “mi cuerpo existió ayer”,
etc. Wittgenstein se inspiró en estos problemas para escribir SC.
Los
conocimientos mediatos presuponen conocimientos inmediatos, podemos asegurar
que los conocimientos mediatos son verdaderos (entre ellos la ciencia) solo si
los inmediatos lo son, la expresión “Si
sabes que aquí hay una mano, te concederemos todo lo demás”, expresa esta
situación, si nuestras certezas son verdaderas entonces todo el resto de
nuestros conocimientos también lo será (asumiendo que están bien deducidos).
Wittgenstein,
a diferencia de Moore, no piensa que las certezas de sentido común sean
indudablemente ciertas. Lo que piensa es que no podemos dejar de pensar que
ellas son verdaderas, sin embargo, ello no quiere decir que lo sean. Verdadero
es lo que puede ser demostrado como tal y para que una afirmación pueda ser
demostrada como verdadera o mostrada su falsedad debe poder ser instalada en
una estructura teórica que soporte demostraciones y ese no es el caso de las
certezas.
Lo
que, en nuestra opinión, llama poderosamente la atención a Wittgenstein es el
condicional mismo, esto es, la forma de la argumentación. En este punto hay que
tener mucho cuidado pues a pesar de que mencionó “forma de la argumentación”
esta forma, como veremos, no es la forma lógica.
Para
aclarar a que forma lógica me refiero, deberemos retroceder a una época
anterior a la lógica. Las leyes lógicas tienen su origen en la práctica
discursiva de los hombres[7].
De hecho, la lógica se originó dos veces en la historia: una en el mundo griego
y otra en el mundo hindú. En ambos casos el contexto social era de debate e
incluso de debate acalorado, es en estos ambientes que surgen personas que
buscan arbitrar ante los debatientes formulando normas de argumentación
válidas. Es así que surge la lógica griega expresada en el famoso Órganon de
Aristóteles. Las formas de argumentación prácticas son más numerosas que las
formas de argumentación que estudia la ciencia lógica, pero como con el tiempo
la lógica se desarrolla en forma extraordinaria, la palabra “Argumento” ha
pasado a significar, argumento estudiado en la lógica, de modo que no ha
quedado lugar ni palabra adecuada para expresar esos “argumentos prácticos” que
son justamente el origen de los otros, esto es de los argumentos que sí estudia
la lógica.
Lo
que asombra a Wittgenstein, es el descubrimiento de un nuevo tipo de argumento
práctico, uno que no está contemplado en la lógica matemática y que sin embargo
es comúnmente usado por los filósofos de todos los tiempos. Le asombra la
validez del argumento, “Si sabes que aquí
hay una mano, te concederemos todo lo demás”. Lo válido de este argumento
parece haber sido sostenida por todos los filósofos, lo que nuestro autor se
pregunta no es si dicho argumento es correcto, sino ¿en qué se fundamenta la
confianza que tenemos en él? (argumento usado contra el escepticismo).
Si
le preguntamos a un filósofo que tipo de argumentación es este; Si sabes que aquí hay una mano, te
concederemos todo lo demás, nos responderá simplemente que es una
argumentación filosófica, incluso si es irónico nos dirá “bien venido a la filosofía”, pero esto es una trivialidad, porque
responde por el tema de la argumentación y no por el tipo de argumentación que
se suele usar en dichos temas. La pregunta por el tipo de argumentación es
independiente del tema.
Como
la forma de argumentación independiente del tema estamos tentados a preguntamos
por la forma lógica de la argumentación. Si no depende del tema podríamos por
ejemplo aplicar esta forma de argumentación a la lógica matemática. ¿Qué
pasaría entonces si ese “todo lo demás” se refiere a todas las verdades
lógicas?, o incluso ¿a cualquier proposición lógica? si así fuera tendríamos un
argumento lógico con el cual sería posible probar todo, lo cual no deja de ser
sospechoso.
A
primera vista la frase es un condicional de la forma
O
más simple
Por
otro lado, si este es un tipo de argumentación valida, aun cuando no fuera
estudiado por la lógica, ¿Por qué no habría de poder aplicarse a la lógica? Las
formas de argumentación deben ser tales que podamos aplicarla a cualquier tema.
Si así fuera entonces estaríamos ante un tipo de argumentación nuevo y muy
poderoso.
Esta
forma de argumentación cuando es usada en filosofía posee dos cosas a su favor:
por un lado, parece correcto y verdadero y por otro es muy importante por las
consecuencias que tiene. Tiene también un grave problema, si es considerado un
argumento o una forma general de argumentar entonces debería poder aplicarse a
cualquier tema, incluido la lógica, y esto lo convierte en un argumento
sospechosamente falso. Por esta razón lo más razonable es que esta forma de
argumentación no sea realmente completamente general, sino que se pueda aplicar
solo en ciertas ocasiones o ámbitos. Wittgenstein parece haber seguido este
camino.
3. ¿Es realmente una argumentación?
Wittgenstein no
parece haber creído que se tratara de una argumentación lógica en el sentido
habitual, pues la expresión “Si sabes que aquí hay una mano, te concederemos todo lo demás”, posee la palabra “concederemos” y no la palabra “entonces”. Y es
que conceder no es lo mismo que exigir y el condicional es una exigencia
lógica, conceder por su parte es algo que se otorga, pero no con un carácter de
exigencia. Conceder es ceder, cedemos ante la exigencia del otro, pero eso hace
de la expresión nuclear no una expresión lógica sino un acuerdo entre las
partes, lo que es muy distinto.
Al
escribir la palabra “concederemos” en lugar de “entonces”, Wittgenstein parece
haber querido excluirse del debate sobre el conocimiento verdadero.
Wittgenstein toma distancia de este debate y
cual si fuera un observador de la forma de razonar de los humanos anota
respetuosamente “concederemos”, de esta forma consigue:
1.-
salir del debate
2.-
señalar que le interesa examinar la forma de argumentación que se está usando
3.-
Distanciarse de la posición que asegura, tajantemente, que esta argumentación
es lógica. Este “concedemos” no sería una implicación como piensan los
antiguos, se trataría de otra cosa.
Por
otro lado, Wittgenstein, nos señala que el “antecedente” de la proposición
nuclear puede ser derivado lógicamente, pero eso no es lo mismo que decir que
está probada; pues
(Por supuesto, decir que una proposición semejante no puede ser
probada no significa que no pueda ser derivada de otras proposiciones; cualquier
proposición puede derivarse de otras. Pero puede suceder que estas no sean más
seguras que aquella).
Entonces
se nos hace claro que no habla de la verdad lógica; pues es esta verdad la que
se prueba e inmediatamente señala el límite de la derivación lógica, aquello
con lo cual lo pruebas “puede ser que no
sea más segura que aquellas”. El problema es la seguridad.
Analicemos
más de cerca la expresión nuclear, ella tiene la forma de un condicional.
Tenemos
seguridad de la verdad del antecedente “c”; pues se trata necesariamente de una
certeza, por otro lado “p” es cualquier proposición, sea certeza o no. Es por
esta razón que pensamos que lo que asombra a Wittgenstein es el rol tan
extraordinario que tienen estas proposiciones de certeza, el cual nos hace
“conceder” la verdad de todo lo demás.
Wittgenstein
no discute la validez del condicional nuclear, sino que parte de considerar que
es cierto, pero ¿no es eso a su vez una certeza?, y si es así entonces ¿no es
un problema circular?, ¿no estudia las certezas asumiendo desde ya su
existencia? No existe ningún error lógico en estudiar algo asumiendo desde ya
su existencia, por el contrario, el error estaría en estudiar las propiedades
realmente existentes de algo que asumimos no existe. La primera anotación de SC
no es ningún círculo vicioso.
4. El fantasma de Curry
Si la expresión
nuclear es a su vez una certeza suceden cosas muy raras, pues en lugar de
Tendríamos
que bien podría ser
Es
decir que la expresión misma es a su vez una certeza. La expresión verbal de
esta situación sería:
“Si esto es una certeza entonces P es verdad”
La
cual no es; sino otra forma de mencionar la famosa paradoja de Curry (“si no me
equivoco P es verdad”).
El
logicista y matemático estadounidense Haskell B. Curry quien la presentó en
1942 en “La inconsistencia de cierta lógica formal”. Su presentación fue formal
y hay que esperar hasta 1955 para encontrar una versión verbal de la misma
gracias a Arthur N Prior. La forma general de las paradojas de Curry es si todo
este condicional es verdadero entonces se sigue cualquier cosa. La paradoja de
Curry aún suscita debate, se trata de un problema importante de la lógica
actual.
Entonces
tenemos que, si aceptamos que la expresión nuclear es a su vez una certeza, nos
enfrentaremos a una paradoja que aún está sin solución, pero si no aceptamos
que la expresión nuclear es una certeza, entonces ¿Cómo es posible que
distintos filósofos durante milenios la consideraran correcta? ¿Qué haría usted?
Es
aquí donde brilla el genio de Wittgenstein, por un lado, el acepta que la
expresión nuclear es una certeza, pero por otro, niega que se produzca la
paradoja de Curry, ¿Cómo?, negando que sea realmente un condicional, no es un
“entonces” el que escribe, sino un “concederemos”. Es decir que es una
expresión que parece y se toma habitualmente como un condicional, pero que no
lo es. De hecho, podemos “conceder” que se tome como un condicional porque en
el argumento gnoseológico así parece funcionar, pero ello no implica que esas
sean todas las propiedades de las certezas, ni explica cómo se comportarán las
certezas en otras situaciones; por ejemplo, entre ellas mismas, etc.
Por
otro lado, no hay duda que la expresión de Curry
Nos
lleva a una paradoja[8],
pero si la expresión no representa realmente un condicional, aun cuando lo
parezca, entonces realmente no se produce la paradoja. En otras palabras, la primera anotación de SC es una respuesta a la
paradoja de Curry, una respuesta que partiría de un análisis pragmático del
lenguaje involucrado en la paradoja.
En
este punto, es importante destacar que Rafael Mora propuso el 2020 una solución
pragmática de la paradoja de Curry[9],
demostrando con esto, su gran intuición lógico-filosófica.
Es
muy poco probable que Wittgenstein conociera la paradoja de Curry, (que por
entonces no tenía forma verbal) aunque es muy probable que conociera su propia
versión: “si esto es una certeza entonces P es verdad”, de esta forma SC se nos
presenta como una especie de respuesta, no deliberada, de la paradoja de Curry
y en ese sentido como un trabajo de lógica.
Nuestro
análisis nos lleva a presumir que Wittgenstein se concentrara entonces en el
estudio de las proposiciones de certeza, pero ello inevitablemente implica
enfrentarse al grupo de filósofos que consideran que no existen las certezas,
los escépticos, de este modo, también es de esperar que se enfrente a ellos, lo
que no nos parece razonable es pensar que SC es fundamentalmente un libro sobre
el escepticismo, por el contrario, es un libro sobre la certeza.
5. Resultados: el análisis
lógico
El que
Wittgenstein no aceptará la paradoja de Curry nos puede llevar a pensar que el
análisis de Sobre la Certeza no será un análisis lógico, pero lo cierto
es que aún quedaban muchas preguntas por responder. El que el término
“conceder” no sea una operación lógica no niega, sin embargo; que, a muchos
filósofos en la historia, así les pareciera y que por ello concluyeran que, si
estaba probada la existencia indudable de ciertas verdades reales, entonces
estaba refutado el escepticismo (o al menos muy debilitado), por esta razón aun
cuando no hubiera una razón lógica (como una implicación) si podría haber una
razón de algún otro tipo y esta otra razón merecía ser explorada.
Lo
primero es que las razones lógicas se dan entre proposiciones y mediante
operaciones como son la equivalencia, la implicación, la negación, disyunción,
etc. Siendo que esta nueva relación se da entre las proposiciones que expresan
certezas y las que no expresan certeza, aun cuando expresen otros saberes, las
preguntas que surgen son ¿Cómo distinguir a estas proposiciones certeza? ¿Cómo
se relacionan con las proposiciones que no expresan certezas? ¿Cómo se
relacionan entre sí? El análisis de Sobre la Certeza se dedicará a estas
preguntas, como lo sostengo en mi tesis de maestría de la cual esto, es un
adelanto.
El
problema con el planteamiento del párrafo anterior es que supone que las
proposiciones certezas y las que no, pueden sostener un conjunto de relaciones
que, sin embargo; no son las relaciones lógicas que conocemos, esto es muy
difícil de conceptuar, porque las proposiciones tal y como son están, por
decirlo así, diseñadas para mantener justamente relaciones lógicas, lo cual es
fácil ver con un análisis de las tablas de verdad.
Sobre
la Certeza se desarrollará entonces como un
análisis lingüístico, pero con un extraño sabor a consecuencia lógica. Las
observaciones epistemológicas serán inevitables, puesto que las proposiciones
que no son certezas caen de inmediato en la categoría de proposiciones que
merecen justificación, es decir de conocimiento, pero ello no implica que el
libro en sí esté dedicado a la epistemología, como algunos sostienen. Del mismo
modo, el que se tenga que analizar la Certeza nos acerca a su opuesto la duda,
el escepticismo, pero ello no implica que el tema fundamental del libro sea el
escepticismo. En sobre la certeza Wittgenstein va en busca de esclarecer esta
nueva forma de razón que ha sido razonable para los humanos y que permite
“conceder” a los más grandes pensadores de la historia. SC es un estudio de
esta parte de la razón humana.
Por
otro lado, es razonable que SC sea un estudio de la razón humana, pues
Wittgenstein no parece sino haber hecho eso a lo largo de su vida. Si bien
Wittgenstein es conocido como un filósofo del lenguaje, no es porque tuviera
algún tipo de fetiche por el lenguaje, sino porque como él mismo aclara “su
mundo” es el lenguaje, de modo que al estudiar el lenguaje estudia la forma
como la razón humana se relaciona con el mundo. El Tractatus trata de un
estudio de la razón humana, pero no en cuanto su funcionamiento, como podría
haber ambicionado Kant, sino en cuanto a sus resultados de este funcionamiento,
los cuales son lingüísticos. Esto es que la razón humana se expresa
lingüísticamente, y si este es el caso, ¿para qué describir los procesos
previos a dicha expresión?
Veámoslo
desde otro ángulo. Si alguien le plantea a un lógico matemático actual, como se
debería entender la solución de la paradoja de Curry, seguro no tendría duda de
decir que es un avance en el estudio de la razón humana, algunos incluso
reducirían razón humana a razón lógica. Wittgenstein también piensa que es un
estudio de la razón humana, solo que esta no tiene por qué ser más una parte de
la lógica, aun cuando su relación con las proposiciones no certezas sean
paralelas o semejantes a la lógica matemática.
Por
otro lado, si el argumento nuclear no es un argumento lógico y no es un
argumento empírico entonces la verdad producto de esta nueva razón, no podría
ser una verdad lógica (como una tautología) ni empírica (como una verdad
científica o real). ¿Qué tipo de verdad es? Sobre este punto Wittgenstein
guarda silencio, pero es sin duda una pregunta profunda. Si existiera otro tipo
de verdad, que surge de este “argumento”, quizás debería llamarse definición de
verdad pragmática, después de todo, el análisis que va conformar la mayor parte
de SC es pragmático.
Al
proponer una nueva interpretación de la frase nuclear, Wittgenstein se nos
presenta como un nuevo tipo de lógico o crítico de la lógica matemática, pues
mientras los creadores de las lógicas no clásicas realizan sus criticas
cambiando aspectos sintácticos de la lógica, como negando algunas leyes lógicas
o no admitiendo algún tipo de inferencia, Wittgenstein lo realiza proponiendo
nuevos tipos de proposiciones que evitan el desarrollo de paradojas.
Debido
a la relación que las “proposiciones de certeza” tienen con el sentido de las
proposiciones derivadas, esta nueva razón sería aquella que discute sobre el
sentido o falta de sentido de nuestras proposiciones usadas en las inferencias
y no ya sobre la verdad de las mismas. Si consideramos que la lógica no debe
discutir sobre el sentido de sus proposiciones, sino que parte de asumirlas,
entonces Sobre la Certeza no es parte de la lógica, pero si por el
contrario partimos de considerar el sentido como parte y asunto de la lógica,
entonces el Wittgenstein de Sobre la Certeza es un logicista.
Las
certezas son el conjunto de proposiciones que creemos para que tenga sentido
ese otro grupo de proposiciones sobre el mundo que son derivadas. Así por ejemplo la ciencia física tiene
sentido si asumimos que existe un mundo de fenómenos físicos, pero la
existencia de este mundo es una certeza, simplemente no podemos dejar de creer
que existe un mundo físico en las percepciones de nuestra mano o cuerpo.
El
estudio del sentido es fundamental para la lógica porque las paradojas se nos
revelan como sin sentidos. Existen en la actualidad varias paradojas lógicas
como la del prefacio, Zenón reforzado, etc. Siguiendo el método de Wittgenstein
éstas también podrían ser analizadas lingüísticamente
Esto
representa un giro pragmático en los estudios de lógicas no clásicas, algo que
también ha sugerido Mora se debe hacer. Analizar las proposiciones según su
juego del lenguaje en alguna expresión antes de concluir que se trata de una
paradoja irresoluble es una tentadora oferta.
Bibliografía
Agambem, Giorgio (1996). La
comunidad que viene. Valencia: Pre-Textos.
Aristóteles. Tratados de lógica (Órganon). I. Madrid: Gredos (1988).
https://archive.org/details/aristoteles-tratados-de-logica-organon-i/page/7/mode/2up
Chica, Víctor Hugo. Wittgenstein y el tipo de análisis por tipos
proposicionales en Sobre la
Certeza (2015).
http://www.scielo.org.co/pdf/ef/n52/n52a08.pdf
Faerna, Angel Manuel. El juego del
conocer. Reflexiones del Wittgenstein en torno a la certeza en Logos. Anales del Seminario de Metafísica 24, 1990.
Gomes Alonzo, Modesto. Wittgenstein y justificación de las
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https://www.redalyc.org/journal/3798/379862707008/379862707008.pdf
Mora, Rafael. La paradoja de Curry. Un examen crítico (2020).
Platón (1988). Diálogos V.
Madrid: Gredos.
https://posgrado.unam.mx/filosofia/pdfs/Plat%C3%B3n_DI%C3%A1logos%20V.pdf
Reinoso, Guadalupe. Seminario Internacional de Filosofia 2. Neo
Pirronismo. Crisis y critica del lenguaje” (2021).
https://www.youtube.com/watch?v=b1WJuruJ0MY
Santivañes Ñañes, Cristian. Certeza animal: ¿Un tercer Wittgenstein? (2011).
Villarmea, Stella. G.E Moore y la
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https://ebuah.uah.es/dspace/bitstream/handle/10017/7468/G.E.Moore.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Villarmea, Stella. Wittgenstein y la
certeza (1998).
Wikipedia. Paradoja de Curry (2019).
https://es.wikipedia.org/wiki/Paradoja_de_Curry
Wittgenstein,
Ludwig.
Tractatus logico-philosophicus. Investigaciones filosóficas. Sobre la certeza (2009). Madrid: Gredos.
[1] “…eso que llamamos admiración es muy característico de la filosofía.
Este y no otro, efectivamente es el origen de la filosofía” del Teeteto (Platón,
1988 , 155 d).
[2] “La última anotación fue hecha dos días antes de su muerte, el 29
de abril de 1951” (íd, 639).
[3] “31. Me gustaría eliminar del lenguaje filosófico las
proposiciones a las que volvemos una y otra vez como hechizados” (íd, 649).
[4] “…(en palabras de Badiou): ‘‘Lo sustraído a la autoridad de la
lengua, sin nominación posible, indiscernible’’” (Agambem 1996, 48).
[5] “Descartes llama intuición y deducción a lo que
nosotros hemos llamado conocimiento inmediato y conocimiento derivado” (Faerna,
1990, 80).
[6] “Este es el origen de la tesis típicamente empirista que suele
ser identificada con la etiqueta de “falibalismo”, y según la cual, las
proposiciones empíricas- o simplemente, las proposiciones del mundo externo- no
pueden ser nunca objeto de verdadero conocimiento, sino, todo lo más, de una creencia
razonable” (op. cit., 81).
[7] “…se podría decir que la lógica aristotélica supone, a la vez, un
avance y un retroceso. Retroceso a los orígenes de una técnica de discusión” (Miguel
Candel en Aristóteles, 1988, 8).
[8] “Si este enunciado es verdad entonces B.
Y,
si le ponemos nombre a la anterior oración quedaría así:
A
= Si este enunciado es verdad entonces B
Pero
como todo el enunciado es A quedaría así:
A
= A → B” (Mora, 2020, 6).
[9] “Ahora bien, analizando la paradoja de Curry con esta nueva
estrategia pragmática ¿Qué implica conversacionalmente que alguien nos diga que
si lo que dice es cierto entonces B? Esta cuestión puede tratarse pensando en
la expresión de Curry y su significado a nivel conversacional” (op. cit., 113).
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